Festividad 3 de Enero.
Gloriosa y
virtuosa santa Genoveva:
tú que creciste en
gracia y santidad
delante de Dios y de los hombres,
que desde joven
demostraste
grandes deseos de
vivir como virgen cristiana,
atiende mis
suplicas.
Caritativa y
salvadora santa Genoveva:
tú que fuiste el
punto de unión
entre barbaros y cristianos romanos
con la misión de
trasmitir la fe católica,
liberar hombres encarcelados,
sanar a los enfermos
y
socorrer a los necesitados,
escucha mis ruegos.
Santa Genoveva
ejemplo de virtud y
piedad,
mortificación y oración,
que padeciste
enfermedad
y fuiste
trasportada en espíritu
entre los coros de
los ángeles,
para que el Señor
te diera a conocer
todo lo que habrías
de padecer
por su amor el
resto de tu vida,
acude en mi ayuda,
igual que lo
hiciste con tu pueblo afligido
y no dejes que
esta grave situación
en la que me
encuentro
se alargue por más
tiempo:
(hacer la
petición)
Santa Genoveva
magnánima en
caridad
y venerada hasta
por los paganos,
te pido
encarecidamente
atiendas mi petición
y la concedas si
es para mayor bien
y salvación de mi alma,
para mayor honra y
gloria
de Nuestro Señor,
que vive y reina
por los siglos de los siglos.
Amén.
Rezar el Credo, tres Padrenuestros,
tres Avemarias y tres Glorias.
Rezar el Credo, tres Padrenuestros,
tres Avemarias y tres Glorias.
Santa Genoveva
(Francia 423-502).
Llamada también santa Genoveva de Paris.
Hija de familia
noble, desde los 16 años dedico su vida a servir a Dios y al prójimo fundando
una asociación de mujeres que se ocupaban de difundir el cristianismo y ayudar
a los pobres. En el 451convence a los habitantes de Paris para que no huyan ni
entreguen la ciudad a Atila, rey de los Hunos; consigue que resistan la invasión
y que la ciudad no sea destruida con sus palabras celebres “que los hombres
huyan, si lo desean, si no son capaces de luchar más. Nosotras la mujeres
rogaremos tanto a Dios, que Él atenderá nuestra súplicas”. Durante años por las
noches se reunía con otros cristianos en la tumba de Dionisio de Paris, y después
visitaba enfermos, portando en las manos una vela que el demonio intentaba
apagar pero que su ángel de la guarda no lo consentía. Con su fuerza de carácter,
voluntad, entrega y su gran fe hizo construir la Basílica de San Dionisio en
ese lugar, así como la iglesia de san Pedro y san Pablo. Con su determinación obtuvo
la liberación de muchos presos políticos que iban a ser ajusticiados. Según la leyenda Santa Genoveva convierte al
cristianismo a Clodoveo I y a través de él a toda Francia. Fue nombrada patrona de Paris por las
muchas acciones extraordinarios, milagrosas, que hizo por la ciudad en vida, y
ya fallecida, recurriendo a la urna que contenía sus restos, los cuales fueron
profanados y quemados durante la Revolución francesa, lo poco que pudo salvarse
se traslado a la abadía de Saint Etienne, donde acuden millares de devotos a
pedir sus favores. Santa Genoveva ha sido invocada en épocas
de grandes
calamidades públicas, y ha librado muchas veces a ciudades y pueblos de pestes,
carestías e invasiones de enemigos.
Es patrona de los
problemas oculares (milagrosamente sanó a su madre de la ceguera), contra la
viruela y otras enfermedades víricas o infecciosas, contra el herpes, contra
las fiebres y calenturas, la peste, la sequia, de los fabricantes de velas y
cirios, de los que ayudan en situaciones catastróficas. Protectora en situaciones
de pobreza y falta de recursos, de los que tienen que luchar por sobrevivir, de
los encarcelados injustamente, de los presos, de las personas mayores o solas
que tienen que ocuparse de sus familias, de gran ayuda en las catástrofes y
desastres naturales, epidemias y plagas.
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