Dice tu Ángel hoy:
 
 
 
Camina hacia adelante y con paso sereno por la vida, con el corazón lleno de una certeza maravillosa, la de la victoria final del Hijo de Dios. “Confiad: yo he vencido al mundo” (Jn 16,33), dice él a sus discípulos. 
 
Sí, él vencerá al mundo sumergido en las tinieblas del pecado y la corrupción. Un mundo que sin embargo ha heredado, por tanto, los valores cristianos sin ver su fuente y su destino. Estas huellas del mensaje evangélico crecerán en la medida en que los discípulos cumplan su función de “levadura” en la masa de la humanidad, de luz reflejando la “Luz del mundo”. 
 
Aporta tu parte de levadura esperando la victoria final. ¡Que vocación mas prodigiosa la del cristiano!
 
 
 
 
ORACIÓN AL SANTO ÁNGEL DE LA GUARDA
 
(Autor: San Juan Berchmans)
 
Ángel Santo, amado de Dios, 
que  después de haberme tomado, 
por disposición divina, 
bajo tu bienaventurada  guarda, 
jamás cesas de defenderme, 
de iluminarme y de dirigirme: 
 
yo te venero  como a protector, 
te amo como a custodio; 
me someto a tu dirección y me entrego  todo a ti, 
para ser gobernado por ti. 
 
Te ruego, por lo tanto, 
y por amor a  Jesucristo te suplico, 
que cuando sea ingrato para ti 
y obstinadamente sordo a  tus inspiraciones, 
no quieras, a pesar de esto, abandonarme; 
antes al contrario,  
ponme pronto en el recto camino, 
si me he desviado de él; 
enséñame, si soy  ignorante; 
levántame, si he caído; 
sosténme, si estoy en peligro 
y condúceme al  cielo 
para poseer en él una felicidad eterna. 
 
 
Amén.