Gloriosa Santa Elena,
admiramos tu vida excelsa.
Dios quiso que naciera de ti
aquel gran hombre que llevó
al Imperio Romano la fe de Cristo
y que un día hallaras la madera grandiosa
de la Cruz en que murió Jesús
Obtennos de Jesús fortaleza en nuestra fe
y un amor grande a la Cruz.
También te pido que refuerces mi matrimonio,
que ahora atraviesa por dificultades.
Te ruego que con tu influencia
se solucionen nuestros problemas
y salgamos reforzados en nuestra fe
y amantes, amigos y compañeros
para el resto de nuestras vidas.
Que ninguna contradicción nos aparte de Jesus.
Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor.
Amén.