Alabada y bendita sea
la hora
en que el Hijo de Dios nació
de la más pura virgen María,
a medianoche, en Belén,
en medio de un frío penetrante.
En esa hora concediste,
¡Oh Dios mío!,
escuchar mi rezo
y concederme mis deseos.
Por los méritos de nuestro Salvador
Jesucristo,
y por su Bendita Madre.
Amén.
Oración popular que se debe rezar con fervor
y recogimiento quince veces al día durante veinticinco días, y en especial, los
anteriores a Navidad (desde el 30 de noviembre hasta el 25 de diciembre)
No hay comentarios:
Publicar un comentario